[caption id="attachment_611758" align="aligncenter" width="627"] Eugenio Chicas, secretario de Comunicaciones de la Presidencia. / DEM[/caption]

 

El secretario de Comunicaciones de la Presidencia, Eugenio Chicas, reconoce que no se ha resuelto el problema de la inseguridad, la violencia y la criminalidad, pero destaca una disminución mensual de homicidios que hubo en noviembre y señala que la meta es que ningún salvadoreño sea asesinado. Rei­tera el rechazo a la conformación de una comisión internacional contra la impunidad destacando que la prioridad es fortalecer la institucionalidad del país y da un respaldo a las investigaciones que realiza la Sección de Probidad de la Corte Suprema de Justicia.

 

¿Cuál es es el balance que hace el Gobierno del año 2015?

Se ha caracterizado por ser un año en el cual nos preocupamos de sentar las bases del crecimiento económico, sentar las bases de la solución al conflicto de seguridad que vive el país y establecer la ruta de construir un país educado. El 2015 ha significado poner en marcha el plan quinquenal y permitió desplegar los instrumentos que permitieran abrir espacios de participación a distintos sectores de la sociedad. Me refiero a que tenemos la certeza que los grandes problemas del país no es posible solventarlos si no creamos amplios mecanismos de participación, ya que no son solo problemas del partido de Gobierno o del Gobierno, sino que son problemas de todos los sectores de la sociedad. Este Gobierno, lo que ha cimentado este año es una política muy abierta, tenemos distintas mesas de entendimiento, lo más conocido es el Consejo Nacional de Seguridad, ha sido abierto a las instituciones, a todos los partidos políticos, iglesias, tanques de pensamiento, ONG, empresariado, ha tenido por producto un plan, El Salvador Seguro, que tiene 124 políticas que están en marcha. Pudimos materializar el Consejo para el Crecimiento, está el empresariado, que ha venido de cara a la iniciativa del milenio, ha tenido la virtud de la receptividad empresarial para materializar los objetivos del milenio. El consejo agropecuario, han emanado las políticas que nos permita enfrentar la sequía... Con toda la gravedad de la sequía logramos controlar el precio del frijol, porque ha habido una política de producción y se supieron abrir los contingentes de importación de frijol. Tenemos identificadas a las 38 mil familias afectadas por la sequía...

¿Puede hablarse de logros sin que haya habido resultados en la disminución de la violencia?

El debate en el país en los medios serios como éste es que los homicidios se han reducido entre 30 % y 35 %, venimos de un pico, hasta 42 homicidios en un día. Hemos reconocido que en los periodos navideños siempre hay un sensible incremento, por eso, hemos desplegado el plan de seguridad Belén. Hay consenso que el problema no está resuelto, implica mucho trabajo, esfuerzo, unidad del país, para superarlo en el corto plazo, pero existe consenso en que se ha reducido la criminalidad y el debate que hemos tenido es por qué se ha reducido la criminalidad. Algunos dicen que se puede haber reducido porque sí hay un pacto con estos grupos criminales. Ya el presidente dijo que este Gobierno de ninguna manera ha fomentado o ejecutado ningún plan de acuerdos, compromisos, diálogos o entendimientos con grupos criminales. Tenemos una posición firme de perseguir el delito y no hay ningún espacio de cambiar esa política firme de no dialogar y de no tratar con estos grupos criminales. Para nosotros, éste es un tema que tiene grandes facetas: por un lado, el país enfrenta un problema de inseguridad; por otro, de violencia y en tercer lugar de criminalidad. En materia de inseguridad, son las condiciones económicas y sociales en que viven, si una quebrada le puede arrastrar la vivienda, si esa familia no tiene tierra vive insegura. Hay que consolidar la agenda social del país porque esa es la madre del cordero para poder resolver el siguiente tema, la violencia, un fenómeno social que se vive dentro de la familia y en la calle. En la criminalidad, tenemos el crimen organizado, las bandas, las pandillas, que eso tiene un tratamiento diferente. No se ha resuelto el problema pero creemos estar en la ruta correcta, en la ruta certera que han trabajado todos los actores para establecer la estrategia El Salvador seguro.

 

¿Hay alguna meta en reducción de violencia?

Para nosotros, la meta debería ser que ningún salvadoreño o salvadoreña debiera ser víctima de la criminalidad. Un caso que tuviéramos de violencia y criminalidad es un reto para nuestro Gobierno. Los esfuerzos que día a día venimos haciendo es por erradicar el tema de la violencia, la criminalidad y la inseguridad. La meta es combatirlo todo frontalmente. Disponemos de cinco herramientas: combate a la criminalidad, políticas de prevención –el 70 % de los recursos económicos– y programas de reinserción. En cuarto, la atención de las víctimas. Y en quinto, una estrategia de fortalecimiento institucional.

 

¿Cuáles son las apuestas económicas del Gobierno en 2016?, porque tenemos el menor crecimiento económico en Centroamérica.

El menor crecimiento de El Salvador en Centroamérica ha sido así desde hace más de 25 años. No es un fenómeno nuevo de este Gobierno. Esto se vio agravado con algunas políticas económicas desde gobiernos anteriores, como la dolarización. Nuestro Gobierno, que no tiene una solución al tema de dolarización, sí estamos trabajando en provocar mayores niveles de inversión. Nos congratulamos que en este Gobierno empresas han decidido invertir en el país, por ejemplo: Aeroman, Vijosa, la industria de la generación de energía a partir del gas natural, pero por otro lado a estimular la micro, mediana y pequeña empresa. Este Gobierno, por un lado, trabajará por estimular a la gran empresa y por otro por estimular el mercado interno.

 

¿Qué modelo está aplicando el Gobierno actualmente, partiendo de que el FMLN ha dicho que persigue el socialismo?

Efectivamente nosotros creemos en un socialismo democrático, en un socialismo plural, en un socialismo participativo, que le dé espacio y oportunidad a los distintos sectores, de poder vivir seguros, de poder vivir en paz, de poder construir su propio patrimonio económico. Nuestro modelo no busca quitarle a nadie para darle a nadie, no. Lo que busca es que el país sea productivo, que sea seguro y educado, esa es nuestra visión sobre el socialismo.

 

¿Por qué el Gobierno no cedió a las recomendaciones de cooperantes sobre la creación de una comisión de investigación contra el crimen organizado y la corrupción?

Agradecemos los consejos de los amigos del país. Siempre estamos receptivos a escuchar sus consejos y opiniones que correspondan a la evolución del desarrollo del país las tomamos muy en cuenta. Ya en El Salvador tenemos amplia experiencia en comisiones de investigación de delitos a diferencia de Centroamérica; tras la jornada de los Acuerdos de Paz, tuvimos la Comisión de la Verdad conformada por jueces internacionales con apoyo de la comunidad internacional, nos permitió ser el país que somos, estable políticamente. Antes que Guatemala y Honduras, habíamos transitado la ruta de contar con ese tipo de instrumentos. En la actualidad es más bien fortalecer la institucionalidad del país, el sistema de justicia, fortalecer la capacidad de la Fiscalía General de la República, órganos auxiliares como la Policía Nacional Civil, tenemos una ruta como país. A países como Guatemala les ha costado más, no tuvieron ejecución de Acuerdos de Paz como El Salvador; Honduras nunca tuvo un esquema de solución política. Nosotros ya hemos experimentado esas rutas y cuando hemos recibido opiniones de comunidad internacional o algún embajador las escuchamos.

 

¿Cómo interpreta la voluntad de la Corte Suprema de Justicia, cuando ordena juicios por indicios de enriquecimiento ilícito?, ¿es voluntad de investigar por primera vez estos casos o ve un interés político (partidario)?

El Gobierno del presidente Salvador Sánchez Cerén se ha caracterizado por ser respetuoso de la institucionalidad, se precia de ser cumplidor de absolutamente todas las sentencias que en materia judicial se han emitido en el país, más allá de que podamos tener debate, puntos de vista diferentes. En definitiva, este Gobierno cumple toda sentencia judicial. Cuando vemos esos procesos de investigación, nosotros siempre hemos ofertado nuestra cooperación como Gobierno, en todo lo que podamos aportar al sistema de justicia, lo vamos a hacer y nos parece que si el sistema de justicia por la vía de Probidad está avanzando en investigaciones de esta naturaleza, pues ésta es una muestra de una fortaleza institucional, esto es muestra de independencia de poderes, en el sentido de que más allá de las diferencias somos respetuosos de las sentencias judiciales y tenemos el mayor espíritu de cooperación. Y, al final, tenemos la expectativa de que en cualquier caso, sean los diputados que están sometidos a investigación, sea un político o sea un expresidente que sea sometido a investigación, debe imperar la justicia y deben funcionar las instituciones del Estado.

 

En cinco preguntas

 

¿Qué postura tiene el Gobierno sobre la Ley de Probidad criticada porque le quitó el poder a la Corte de ordenar juicios civiles?

En este momento está bajo estudio de la Secretaría Jurídica de la Presidencia, en este momento está bajo análisis para que el Presidente pueda decidir lo que le corresponda de las prerrogativas de la ley, en su momento tendremos opinión.

 

¿Por qué el Gobierno no logró acuerdos con ARENA?

Porque ARENA abandonó la mesa. Tenemos mucho interés en que ARENA vuelva, tenemos nuestros brazos extendidos para que ARENA decida trabajar por los problemas del país. ARENA hasta hoy no ha votado por una iniciativa que permita fortalecer a la Policía, no ha votado por una iniciativa que permita fortalecer a las Fuerzas Armadas, se ha negado a apoyar el financiamiento a la seguridad, pero nosotros somos pacientes, seguimos invitando a ARENA a que vuelva a la mesa de negociación. Incluso no quiso discutir en la mesa los parámetros para elegir un Fiscal General. Lamentamos la falta de voluntad política de ARENA y seguiremos con el interés de que vuelvan a la mesa.

 

ARENA dice que el Gobierno no acepta propuestas. Por ejemplo, en el presupuesto propusieron recortes.

Es importante que se identifique que los procesos de concertación exigen vocación democrática. Uno no puede llegar a una mesa de diálogo a imponer su propio criterio, tan es así que con el resto de fuerzas políticas nuestro Gobierno se ha podido entender, aprobamos el financiamiento, el presupuesto. ARENA tiene que aprender a concertar, dialogar, tiene que aprender que en una mesa de negociación no se gana el todo por el todo.

 

¿Cómo evalúa el papel de la empresa privada este año?

Altamente positivo. Si el país está teniendo los niveles de crecimiento económico, modesto pero sostenido, si el país está porcentualmente punteando en materia de exportaciones es porque tenemos un empresariado nacional pujante, si hemos logrado concertar los fondos del Milenio es porque el empresariado ha apoyado más allá de algunos pocos líderes empresariales que puedan tener una visión muy ideologizada, la mayoría de empresarios apoya significativamente al desarrollo.

 

¿La relación empresa privada y Gobierno siempre no es cercana, sino tirante?

Es muy cercana. Con ellos, por ejemplo, estamos en el Consejo de Seguridad. Precisamente sin el aporte de ANEP (Asociación Nacional de la Empresa Privada) no tendríamos las 124 políticas del plan El Salvador Seguro. Más allá de los discursos ideologizados, ANEP ha venido contribuyendo. No todos los líderes en ANEP piensan como algunos de sus dirigentes que son muy conservadores.